Julio Herrera Sant, hijo de Domingo y Vicenta, nació en Madrid el 10 de octubre de 1943, fue el menor de dos hermanos de una familia muy humilde del barrio de Tetuán.

De su padre, mecánico, muy vinculado con las causas sociales de la II República, heredó unas fuertes convicciones que le llevaron a comprometerse política y socialmente a lo largo de su vida.

Estudió bachillerato en el instituto Cardenal Cisneros en Madrid y posteriormente realizó estudios en la Escuela Técnica de Peritos Aeronáuticos donde se graduó.

Entró a trabajar en Iberdrola y tras pasar un tiempo en Cartagena se trasladó a Toledo, a la Central Térmica de Aceca, inaugurada en 1970.

Su compromiso social en el ámbito sindical se comenzó a expresar en las elecciones sindicales de 1975, las últimas del Sindicato Vertical donde fue elegido enlace sindical y miembro del Consejo de los Trabajadores; allí conoció a Chema Díaz Ropero, también elegido por los trabajadores de Standard Eléctrica S. A. y se comienza a relacionar con Comisiones Obreras, por entonces un movimiento sindical.

Una de las características personales de Julio fue su capacidad de trabajo que le permitía simultanear diversos tipos de actuación. En 1977 participa en el Equipo de Defensa del Tajo, que encabezó las primeras iniciativas de oposición al Trasvase Tajo-Segura.

En 1978 es elegido en las primeras elecciones democráticas delegado del Comité de Empresa en una candidatura de los sindicatos de clase frente a los corporativos que fomentaba la empresa

Tras un breve periodo en la CSUT (sindicato potenciado por el Partido de los Trabajadores, formado por una escisión del PCE), en 1979 se incorpora a CC OO, ya organización sindical, donde asume una responsabilidad clave en la negociación de los convenios colectivos provinciales y de empresa. Se le llega a conocer como “el ingeniero de CCOO”.

Su prestigio y capacidad de trabajo lo configuran como una de las personas claves que explican que Comisiones Obreras llegara a ser y se consolidara como la primera organización sindical en la provincia de Toledo.

Su compromiso sindical lo compatibiliza con el político y así en 1983 Se incorpora al Ayuntamiento de Toledo, por la lista del PCE, siendo alcalde Joaquín Sánchez Garrido, como concejal de Cultura, sustituyendo a Luis Alfredo Béjar. Fomentó la celebración de la Semana del Libro en Zocodover.

En el III Congreso de CC OO en 1984 fue elegido secretario general de la Unión Provincial de Toledo, dejando por incompatibilidad, la concejalía del Ayuntamiento.

En 1987 vuelve a ser elegido concejal, en este caso en la oposición, siendo alcalde José Manuel Molina. No obstante, presidió la Comisión municipal sobre el Tajo. En 1995 fue elegido concejal por tercera vez en las listas de IU.

Siempre estuvo vinculado a Comisiones Obreras y a la actividad sindical que compatibilizó con su actividad profesional en Iberdrola empresa que nunca dejó y en la que durante mucho tiempo participó en la Sección Sindical Central desde donde se le eligió para representar a los trabajadores en la Comisión Gestora del Plan de Pensiones.

Durante un tiempo fue presidente de Vitra, cooperativa de vivienda promovida por CC OO que llegó a promover más de 1.000 viviendas en Toledo para trabajadores, con calidad y a precios razonables

De talante muy abierto siempre tuvo un compromiso político en la izquierda. Tras las crisis de los renovadores en Izquierda Unida, la creación de Nueva Izquierda y el paso de esta al PSOE se incorporó a este Partido. Milagros Tolón le nombró miembro de la Comisión Gestora del Pacto por el Tajo unos meses antes de fallecer.

Fue una persona íntegra, ninguno de los cargos políticos y sociales que tuvo fueron retribuidos y siempre los compatibilizó con su actividad profesional en Iberdrola.

En sus últimos años sacó tiempo para el deporte de veteranos participando en la Asociación de Fondistas Toledanos llegando a conseguir una medalla de bronce en la media Maratón de Madrid en la categoría de más de 70 años en 2014.

Su vida también estuvo vertebrada por la formación de una familia con Mª Dolores Alvarado (Lola) a la que adoraba y con los hijos que tuvieron: Daniel, Berta y Celia que les adoraban a ellos.

Falleció en Toledo el 20 de febrero de 2016.