Alberto Iniesta Jiménez nació en la calle Gaona, número 2, de la ciudad de Albacete en 1923. Numerosos trabajos de periodista, sastre y pintor ocuparon su juventud. De vocación religiosa tardía, comenzó sus estudios en el seminario menor de Hellín y los terminó en la Pontificia de Salamanca. Fue ordenado sacerdote en Lourdes en 1958 y, ese mismo año, tras una brevísima estancia en San Pedro como párroco, fue nombrado profesor del Seminario Mayor de Albacete. Este cargo lo ocupó hasta 1972; catorce años en los que transformó la institución en su forma y fondo, actuando como vanguardia educativa de las conclusiones y el espíritu emanados por el Concilio Vaticano II. Cultivó a los seminaristas en ideas de libertad, progreso y justicia social, causando no pocos problemas a los dos obispos de la diócesis albaceteña con los que coincidió: Arturo Tabera e Ireneo García. También impulsó el fenómeno del apostolado rural durante los años sesenta, orientando a jóvenes sacerdotes a vivir en el pobre y atrasado medio rural para poder ayudar a los trabajadores y campesinos.
En 1972 fue llamado por Vicente Enrique y Tarancón, presidente de la Conferencia Episcopal Española entre 1971 y 1981, para ser obispo auxiliar de Madrid-Alcalá con jurisdicción en el barrio de Vallecas-Entrevías. Aceptó el puesto, y pronto se mostró partidario de mantener un diálogo abierto con los sectores comunistas clandestinos, siendo caricaturizado por la prensa como el «obispo rojo». ¿Cómo fue posible que Iniesta, clérigo progresista, accediera al cargo de obispo auxiliar durante la dictadura? El Vaticano post-conciliar aprovechó que los prelados auxiliares no estaban obligados a ser presentados previamente a Franco, y valiéndose de ese resquicio pudo introducir a ciertos clérigos renovadores dentro del episcopado.
Desde su llegada a Vallecas intensificó la lucha por los trabajadores y la defensa de los más necesitados: en 1973 abrió las puertas de las iglesias vallecanas a los trabajadores en huelga que huían de la policía y, cuando las Fuerzas del Orden Público pretendieron desalojarlos, Iniesta les negó la entrada a los templos, siendo arrestado por ello junto a ocho huelguistas. En abril de 1975 las autoridades suspendieron la Asamblea Cristiana de Vallecas; en ese mismo año Iniesta pronunció una homilía en protesta por las ejecuciones franquistas, condenando la pena de muerte y denunciando la ausencia de los derechos humanos en territorio español. Este acto desencadenó la furia de la dictadura y de sectores conservadores de la Iglesia, las amenazas de muerte se multiplicaron y se vio obligado a marcharse a Roma durante una temporada. Entre la homilía y su partida hacia Roma, Tarancón tuvo que esconder a Iniesta para que no acabase como reo en la prisión de Zamora, reservada exclusivamente para sacerdotes díscolos. La repulsa franquista inicial tuvo su eco con la detención de varios curas de Vallecas que replicaban en misa las palabras de Iniesta. Algunos de estos episodios, y muchos otros, aparecen en su libro Recuerdos de la Transición (2002).
El prelado volvió a España como miembro de las comisiones episcopales de Liturgia (1975-1981) y Migraciones (1984), siendo presidente de esta última entre 1987 y 1990. En los últimos años de su vida, regresó a su ciudad natal donde falleció el 3 de enero de 2016 en la residencia sacerdotal. Sus restos descansan, sin embargo, en la colegiata e San Isidro, en Madrid. Con sus actos, el «obispo rojo» espoleó al sector más progresista de la Iglesia contra la dictadura y el nacionalcatolicismo que cerraban el camino hacia la libertad democrática. Antes de la transición política, fue necesaria una transición religiosa, en la que este albaceteño fue una pieza relevante, tanto en el púlpito como en la calle.
Obras
- Creo en Dios padre. El Credo que ha dado sentido a mi vida; Ed. DDB, Bilbao, 1976
- Recuerdos de la Transición; Ed. PPC, Madrid, 2002
Bibliografía
- ARCHIVO DE LA PALABRA DEL INSTITUTO DE ESTUDIOS ALBACETENSES, «Alberto Iniesta Jiménez» (entrevista, 2005).
- CONFERENCIA EPISCOPAL ESPAÑOLA (3 de enero de 2016). «Ha fallecido Mons. Alberto Iniesta, obispo auxiliar emérito de Madrid», en Conferencia Episcopal Española, rescatado de la web 08.02.19.
- GONZÁLEZ BEDOYA, Juan: «Muere Alberto Iniesta, el obispo que irritó a Franco y desesperó a Tarancón» en El País, 4 de enero de 2016.
- GÓMEZ-FLORES, A., Los años sombríos. Albacete durante el franquismo, Albacete, Altabán, 2015, pp. 388-394.
- ORTIZ HERAS, M., GONZÁLEZ, D. (coords.), De la cruzada al desenganche: la Iglesia española entre el franquismo y la transición, Madrid: Sílex, 2011, pp. 270-271.