Sempere Villarrubia, Ernesto1

Galería

Ernesto Sempere Villarrubia
Peñarroya-Pueblo Nuevo (Córdoba).
1920 -
Cardiel de los Montes (Toledo).
2005.
Administrativo, político y músico.

Ernesto Sempere Villarrubia nació el 21 de noviembre de 1920 en Peñarroya – Pueblo Nuevo (Córdoba), en el seno de una familia republicana, progresista e intelectual de Ciudad Real, comprometida con la izquierda moderada y con el Frente Popular.

En 1936 y con apenas quince años es responsable de Agitación y propaganda de la Federación Universitaria Escolar F. U. E. en el Instituto de Enseñanzas Medias de Ciudad Real. En otoño de 1937 decide involucrarse aún más con la causa republicana, se escapa de casa y con 16 años se enrola en la 88º Brigada Mixta, de inspiración anarquista, participando en combates de primera línea del frente en Cerro Sordo y La Chimorra (Pozoblanco, Córdoba).

Tras resultar herido y ser reclamado por su familia, regresa a retaguardia para convalecer e ingresar luego en el 36º Batallón de Obras y Fortificación del Ejército Popular de la República, mayoritariamente formado por ciudadrealeños, a cuyo frente se encuentra su padre, el mayor Ernesto Sempere Beneyto, destacado intelectual y político de Ciudad Real, Presidente en la provincia del partido Unión Republicana, formación de izquierda moderada del Frente Popular. En este batallón de ingenieros (que se convierte en unidad de combate desde otoño de 1938) permanece como Sargento de enlaces de su padre, ya para ese entonces Teniente Coronel y Jefe del Estado Mayor de Ingenieros de la Agrupación de Divisiones Toral, hasta la batalla de Valsequillo y Peñarroya y el derrumbe de los frentes extremeño y andaluz en marzo de 1939.

Capturado y preso en el campo de concentración de La Granjuela, cerca de Valsequillo (Córdoba), escapa del mismo en junio, para ser preso nuevamente en Ciudad Real en octubre de 1939. Tras ser sometido a un Procedimiento Sumarísimo de Urgencia (nº 7054), es condenado a veinte años y un día de reclusión el 22 de febrero de 1940, viendo el 17 de julio a su padre ser fusilado y siendo él mismo trasladado a la terrible prisión de castigo de Valdenoceda (Burgos) en septiembre del mismo año.

Fruto de su natural rebeldía –negarse a comulgar en la obligada misa de la Semana Santa de 1941– se encuentra con una nueva orden de traslado a la prisión de Las Palmas de Gran Canaria, que se ejecuta en octubre de ese año. Permanece en las islas hasta el 21 de noviembre de 1943, en el que sale en libertad condicional con la pena accesoria de destierro. Al acudir a la península, se le notifica su carácter de supuesto prófugo y es enrolado a la fuerza en un batallón de castigo para “prestar” el servicio militar. Se le traslada al 94º Batallón Disciplinario de Soldados Trabajadores Penados (radicado en Algeciras y el Campo de Gibraltar), en el que permanece preso hasta mediados de 1947.

En diciembre de 1948  y tras su paso durante casi una década por las prisiones y campos de La Granjuela (Córdoba), Gobierno Civil de Ciudad Real, Prisión Provincial nº 2 de Ciudad Real, Prisión Provincial de Valdenoceda (Burgos), Villarcayo (Burgos), Alcalá de Henares (Madrid), Porlier (Madrid), Yeserías (Madrid), Linares (Jaén), Córdoba, Sevilla, Cádiz, Prisión Provincial de Las Palmas (Gran Canaria) y Algeciras (Cádiz), se le comunica la concesión del indulto de la pena de reclusión, permaneciendo desterrado de Ciudad Real, su localidad de residencia, y con obligación de presentación periódica a las autoridades hasta mediados de la década de los 50.

Durante los siguientes cincuenta años, Ernesto Sempere aprendió a sobrevivir, se negó a olvidar y se obligó a perdonar. Fundamentó su nueva vida en el amor a su mujer –Otilia– a sus ocho hijos, a sus ocho nueras, a sus dieciséis nietos y a la creación artística. Murió el 13 de enero de 2005, rodeado de todos los suyos. Sus poesías y sus canciones nos siguen reconfortando.

Bibliografía:

  • M. L., “Ernesto Sempere estuvo en el penal burgalés. ‘Hace unos años volví a Valdenoceda y el viaje de regreso lo hice llorando’”, Lanza, Ciudad Real (21-11-2004), pp. 1 y 7.
  • Natalia Junquera, “Te llamo para perdonarte. Ernesto Sempere fue denunciado por compañeros de colegio. Un tribunal franquista le condenó a 20 años por rojo. Su padre fue fusilado. Él perdonó”, El País, Madrid (13-5-2007).
  • Luis Ríos Frutos, Berta Martínez Silva, Almudena García-Rubio Ruiz y Jimi Jiménez, “Muertes en cautiverio en el primer Franquismo: Exhumación del cementerio del penal de Valdenoceda (1938-1943)”, Complutum, vol. 19, nº 2 (2008), pp. 139-160.
  • Ernesto Sempere Villarrubia, “Memorias de un superviviente del penal de Valdenoceda”, Cuadernos Republicanos, nº 88 (Primavera-verano 2015), pp. 241-251.
  • María del Pilar Bermúdez Martínez, “Anexo V. Ernesto Sempere, Marcos Ana y José Robledano”, Reconstrucción en Realidad Virtual del Penal de Valdenoceda, Máster universitario en Comunicación y desarrollo multimedia, Universidad de Burgos, Facultad de Humanidades y Comunicación, 2024, pp. 54-56. Universidad de Burgos, https://riubu.ubu.es/. Consulta 20-2-2025.

La Academia de Ciencias Sociales y Humanidades de Castilla-La Mancha se enorgullece de presentar el Diccionario Biográfico de CLM, una iniciativa destinada a honrar y difundir la vida y obra de figuras destacadas de nuestra región en diversos ámbitos.

Nuestra misión es preservar el legado cultural, científico y humanístico de Castilla-La Mancha, proporcionando un recurso accesible y riguroso para investigadores, estudiantes y cualquier persona interesada en nuestra rica historia. A través de este esfuerzo colaborativo, buscamos fomentar el conocimiento, la inspiración y el orgullo en las contribuciones de nuestra comunidad a la sociedad global.

Buscador de biografías

Puedes realizar búsquedas por uno o varios campos.

Fecha de nacimiento
Fecha de nacimiento
Fecha de fallecimiento
Fecha de fallecimiento
Sexo