La referencia a Francisco Tolsada Picazo aparece en la red de datos de la Biblioteca Nacional Francesa. En la Exposición histórica del libro español celebrada con ocasión de la feria del de 1944, en el Palacio Nacional de Bibliotecas y Museos escribía la presentación del libro de la exposición. Un hombre nacido en Albacete y que llega a Ciudad Real con el traslado de la residencia familiar. En ese momento cursó sus estudios en el Instituto General Técnico y la Academia General de Enseñanza entre los años 1908 y 1914. Para seguir sus estudios universitarios se traslada a la Universidad Central donde estudió Filosofía y Letras entre los años 1914 y 1918 consiguiendo su doctorado al año siguiente (1919)
Ingresa en el Cuerpo Facultativo de Archiveros, Bibliotecarios y Arqueólogos siendo de los más jóvenes de su promoción y obteniendo plaza y destino en Huelva el 26 de julio de 1921, haciéndose cargo del Archivo de Hacienda y de la Biblioteca Provincial (1921-1922). Al fallecer en 1922 don Manuel Tolsada Gómez, tío suyo, archivero y bibliotecario de Ciudad Real durante varias décadas, se trasladó para dirigir el Archivo de Hacienda, el Archivo Municipal y la Biblioteca Provincial entre 1922 y 1936. Catorce años de intensa actividad que amplían y consolidan la biblioteca de Ciudad Real. Durante su dirección la Biblioteca Pública Provincial traslada su sede al palacio de la Diputación Provincial en 1926.
Compagina su trabajo de archivero y bibliotecario con la docencia y fue profesor de letras, lengua y literatura latina y literatura comparada en la Academia General de Enseñanza en 1927 y después en el Instituto Juan de Ávila entre 1928 y 1936, año en que fue cesado. La imagen de 1930 nos presenta a Manuel Tolsada entre el grupo de profesores, auxiliares y ayudantes del Instituto.
Sus primeras investigaciones se centran en la egiptología, ampliando estudios gracias a estar pensionado en la Universidad de la Sorbona y contar con ayudas de la Diputación de Ciudad Real. En 1936 cursó estudios en la Universidad de Berlín en la Lessing Haus. Su traslado a Ciudad Real le obligó a abandonar su tarea investigadora.
También fue escritor, periodista y editor y se habla de él como “periodista y combatiente, buen conocedor del paño enemigo, delator de injusticias, acusador de conciencias turbias y debelador de falsos prestigios”. En su faceta como periodista que abarca desde 1918 hasta 1944, colaboró con publicaciones de Ciudad Real, Madrid y Barcelona en Vida Manchega, El Pueblo Manchego, La Tierra Hidalga, La Prensa, Solidaridad Nacional, La Vanguardia Española, en la prensa del Movimiento, Lecturas, Siluetas y Albores de Espíritu.
Se dedicó a la política durante los años treinta, actividad que tendrá serias consecuencias posteriormente. Fue destituido por el gobierno de la República en 1936 de su cargo de Auxiliar de Letras del Instituto de Segunda Enseñanza encarcelado y posteriormente adscrito y trasladado como interino al Archivo de la Corona de Aragón (ACA) en mayo de 1937. Por Orden Ministerial el 30 de septiembre de 1937 se le separa definitivamente de su cargo de Auxiliar de Letras del Instituto Nacional de Segunda Enseñanza. El 4 de octubre de 1937 se dirige un oficio a ACA con la copia de la Orden ministerial separándole definitivamente del servicio con pérdida de todos sus derechos.
En 1939 es nombrado director de la Biblioteca de la Universidad de Barcelona, y en noviembre del mismo año es repuesto en su puesto de profesor interino en el Instituto Juan de Ávila de Ciudad Real, trámite meramente administrativo, para revertir sanciones anteriores. Entre 1939 y 1943 fue además profesor de la Escuela de Bibliotecarias de Barcelona obteniendo la cátedra de Historia del Libro y Técnica de Bibliotecas. También fue profesor en la Universidad de Santander. En 1942 publicó la obra Tres momentos del libro de la imprenta Elzeviriana.
En los años 40 pronunció en el Casino de Ciudad Real el pregón sobre la Semana Santa de ayer y de hoy. En 1943 consigue el traslado a Madrid como director de la Biblioteca Universitaria entre el 1943 y 1944 y en 1944 realiza la tasación de la colección arqueológica de los herederos de Eusebio Vasco
Entre 1944 y 1952 es nombrado, por concurso, jefe del Depósito de libros y secretario de la Junta de Intercambio, al mismo tiempo que compatibilizaba sus funciones con las de Profesor de la Escuela de Auxiliares de la Investigación del C.S.I.C, donde impartió asignaturas de Biblioteconomía hasta 1952. Fue Jefe del Servicio de Lectura de la Biblioteca Nacional sentado las bases de la creación de las bibliotecas locales, Inspector de Bibliotecas de la Zona Centro-Sur y director del Centro Coordinador de Bibliotecas de Madrid, Secretario Técnico Primero y posteriormente Jefe del Servicio Nacional Coordinador de Bibliotecas hasta su fallecimiento en 1958. El mapa de la Junta de adquisición y distribución pública del libro (JADP) que recogía la situación de las bibliotecas españolas señalaba una única biblioteca en la provincia de Ciudad Real.
Consejero Fundador del Instituto de Estudios Manchegos y desde 1954 miembro de este. Su discurso de ingreso fue sobre la vida del humanista manchego Bartolomé Jiménez Patón discurso al que contestó don Carlos Calatayud Gil. Cuando fallecía el 23 de abril de 1958 el Boletín de información municipal de Ciudad Real de diciembre de ese año publicaba el artículo de Francisco Pérez Fernández titulado Don Francisco Tolsada Picazo, un manchego de excepción.
Miembro de la capa
Colaboró activamente en la creación de las Casas de Cultura de Cáceres y Murcia, confeccionó el Inventario de los Archivos de la provincia de Ciudad Real (1952) y participó en diferentes cursos como el de Bibliografía y Bibliotecas en la Universidad de Verano de Santander (1944).
Fue comisario de las Exposiciones Históricas del Libro Español de 1944 y 1952 organizadas por el I.N.L.E de las que escribió catálogos y Guías de visitantes. En 1953 publicó la Bibliografía española de agricultura 1495-1900, con prólogo de Miguel Herrero García. En 1950 presentó la ponencia: La política bibliotecaria del nuevo Estado celebrada por Juan Ramón Jiménez. Fue Colaborador del C.S.I.C (Instituto Nicolás Antonio), vocal de la Junta Técnica del Cuerpo de Archiveros, Bibliotecarios y Arqueólogos, vocal de la Comisión del Tesoro Bibliográfico y Documental y redactor Jefe de la Revista de Archivos, Bibliotecas y Museos
En Ciudad Real fue un conocido miembro de la capa, grupo de amigos manchegos que vestían con capa española. Su madre, doña María de Picazo y Picazo, fundó la Tipografía Alpha, situada en la Calle Calatrava 5 y regentada por D. Manuel Tolsada Picazo, su hermano. Una presencia asociada a la segunda etapa de la biblioteca de Ciudad Real en el siglo XX.