Hijo de José María Blanc Perera y Sofía Rodríguez Vilallonga, casado con Carlota Garrido Domínguez, tuvo cuatro hijos, José María, Sofía, Carlota y Manuela.
Licenciado en Derecho por la Universidad Central de Madrid en 1917, colegiado en Albacete y Madrid, ejerció la abogacía como criminalista, defendiendo con éxito varios casos de pena de muerte. Además, a partir de 1917, fue representante de Tabacalera SA en Albacete durante medio siglo.
Fue concejal de Albacete en 1922, alcalde entre 1930 y 1931, durante la dictablanda del general Berenguer, y elegido concejal en las elecciones de 12 de abril de 1931 que supusieron la caída de la Monarquía. Se afilió entonces al Partido Republicano Radical, de Alejandro Lerroux. En las elecciones de 1933 fue elegido diputado a Cortes por Albacete, y formó parte del primer Gobierno Lerroux como director general de Caminos (Obras Públicas). Desde ese puesto impulso el proyecto del ferrocarril Baeza-Utiel y construyó la primera carretera de circunvalación de Albacete. Fue ponente del Proyecto de Ley de Ferrocarriles de 1935, presidente de la Comisión de Obras Públicas de las Cortes de 1933 a 1936, realizando un viaje oficial a Alemania para estudiar el sistema de autopistas. Fue vocal de la Junta Superior Consultiva de Obras Públicas y de la Comisión para el traspaso de servicios a la Generalidad de Cataluña. Fue uno de los fundadores de la Unión Española de Municipios en 1930, ocupando los puestos de consejero y tesorero hasta 1936.
Al estallar la Guerra Civil fue perseguido en la zona republicana, escapando a Francia con riesgo de su vida. Aunque se incorporó a la zona franquista y fue nombrado representante de Tabacalera en Málaga en 1937, al terminar la contienda fue represaliado por el nuevo régimen por su militancia republicana en el Partido Radical y por una supuesta pertenencia a la masonería, siendo confinado durante dos años en Zamora. Eso pondría final definitivo a su carrera política.
Se le permitió regresar a Albacete en 1942, siendo siempre una personalidad muy popular. Fue mentor de Juan Montero, el primero de los toreros de la llamada Escuela de Albacete, llegando a desempeñar el cometido de apoderado del matador en su mejor temporada, antes de la cogida de Murcia. Fue presidente de la Peña Juan Montero desde 1950 hasta su extinción. También lo fue del Círculo de Bellas Artes y de la Sociedad Filarmónica de Albacete en 1927, y del Club Cinegético entre 1931 y 1934.
Fue colaborador del diario El Defensor de Albacete entre 1926 y 1936, así como crítico literario en varios periódicos bajo el seudónimo “Un Crítico de La Mancha”. Muy aficionado al flamenco, tocaba la guitarra hasta que un accidente ferroviario le afectó los nervios de la mano.
Fue académico de número de la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación.
Murió en Albacete el 15 de junio de 1981.
Bibliografía
- M. Requena Gallego, Partidos, elecciones y elite política en la provincia de Albacete, 1931-1933, Albacete, Instituto de Estudios Albaceteños, 1991;
- R. Mª Sepúlveda Losa, Republicanos tibios, socialistas beligerantes. La República social Inviable. Albacete 1933-1936, Albacete, Instituto de Estudios Albaceteños, 2002.
- L. Reyes Blanc, Retrato de familia (Una novela de provincias), Toledo, Almud ediciones de CLM, 2018.
Foto: José María Blanc Rodríguez en tiempos de la II República (facilitada por el autor).