Nacido en Tarancón (Cuenca) el día 11 de diciembre de 1901, falleció en México D. F. el día 5 de abril de 1974. Abogado, profesor, poeta y político.
Cuarto vástago de nueve hermanos, estudió primaria y bachillerato en el colegio privado regentado por su padre, cursó derecho en las universidades de Madrid y Murcia, donde obtuvo el título de licenciado.
En Tarancón ejerció la docencia privada, la administración del sindicato de labradores, la abogacía y la secretaría del juzgado comarcal. Su coetáneo Pascual Iniesta, miembro de la Asociación de Médicos Escritores, decía que los hijos de familias acomodadas de su época, estudiantes universitarios, militaban en partidos de izquierda por la atracción y veneración que ejercía Manuel Azaña.
Actividad política.
Fue presidente local del partido Republicano Radical Socialista, creado por Marcelino Domingo, desde el que pasó a la nueva formación Izquierda Republicana; creación conjunta de Marcelino Domingo y Manuel Azaña. Por su carácter benevolente, interés por lo social, buen conocedor de la cultura rural, Luis Rius Zunón hubiera podido desarrollar una eficaz actividad política en tiempos de paz y concordia, circunstancias que no se dieron entre los años 1932 y 1937. Periodo en el que regentó la alcaldía de Tarancón, la presidencia de la Diputación de Cuenca y los gobiernos civiles de Soria y Jaén.
El cese masivo de alcaldes y concejales de los partidos de derechas y la aplicación del Decreto de 8 de mayo de 1931, obligó al Gobernador Civil a nombrar comisiones gestoras en Tarancón y muchos otros pueblos, así como renovar la Diputación Provincial, en 1934, de la que fue elegido presidente Luis Rius Zunón.
Su llegada a la alcaldía, año 1932, coincidió con la suspensión de las actividades de la banda de música creada en 1924, por enfrentamientos entre sus componentes, la desaparición de la academia de música y su proyectado orfeón escolar. Estos contratiempos no obstaculizaron importantes obras en el casco urbano y la creación de un Colegio Libre Adoptado, germen del Instituto de Enseñanza Media.
En el año 1935 fue nombrado gobernador civil de Soria y en 1936 de Jaén, donde hubo de enfrentarse a la sublevación militar, que originó “nuestra monstruosa guerra”, [carta a Dimas Pérez, 25-abril, 1967] a la que manifestó su rechazo, siendo el primer gobernador civil que comunicó su adhesión al gobierno de la República.
Opuesto al reparto de armas, se vio conminado a entregarlas. Los trágicos sucesos de Jaén y Úbeda, la llegada de prisioneros del frente de Córdoba, la violencia incontrolada, la carencia de medios para enfrentarla, su carácter benevolente, su personalidad pusilánime, le llevaron a un estado de impotencia, al que intentó encontrar soluciones urgentes. Por otra parte su Tarancón natal no se libró de las milicias anarquistas que sembraron el terror, saquearon su propia vivienda, biblioteca y archivo, asesinando a algunos familiares de su esposa.
En colaboración con su fiel secretario del Gobierno Civil, ofreció salvoconducto al obispo, monseñor Basulto, quien rechazó el ofrecimiento para no abandonar a su cabildo; rescató e inventarió el tesoro diocesano de Jaén, y lo depositó en el Banco de España, donde fue encontrado hacia 1953. Con permiso del ministro de Gobernación organizó el traslado de los presos políticos a la cárcel de Alcalá de Henares, de cuya tragedia final no fue culpable ni responsable, como demuestra Santiago Mata, en su obra El tren de la muerte (Madrid, La Esfera de los Libros, 2011).
Tras los sucesos de los trenes en Madrid, Rius abandonó Jaén y fue nombrado consejero delegado de la compañía Transmediterránea, hasta 1937, que decidió salir de España e instalarse en París, donde ya residía su hermano Carlos. Finalizada la guerra civil marchó a Estados Unidos, con el propósito de residir allí, pero las dificultades del idioma le aconsejaron trasladarse a México.
Poeta.
Su poesía refleja el amor por la cultura española y la popular de la Mancha Alta. Inmerso en la comunidad rural agrícola que configuran sus paisanos taranconenses, experimenta emociones, pensamientos y reflexiones, sobre la trascendencia, la muerte, el amor, los apodos, la toponimia, la historia, etcétera, “y piensa volver un día/ al pueblo donde nació/ con el paso tan derecho/ como cuando de él salió” [Romancero p.282].
El Cancionero de Tarancón, inspirado en la variedad temática del folclore manchego, lo plasma en canciones, poemas, romances, jotas, villancicos, nanas, etc., muchos de ellos inspirados en los grandes nombres de la literatura española.
La versión culta del folclore taranconero se gestó en el Tarancón del primer tercio del siglo XX; recopilado por la familia Rius, se fraguó en el exilio mexicano de la posguerra y volvió a Tarancón por la doble vía de la imprenta y la discografía, fundiéndose con el variado cancionero popular de la Mancha Alta.
El artífice principal de este folklore culto fue don Luis Rius Zunón quien, cual mester de clerecía, dio formas métricas y música a un variado conjunto de temas de la tradición oral de su pueblo, muchos de ellos conservados entre los habitantes de las cuevas del Camino Real de Madrid a Cuenca, en funciones de mester de juglaría. La pérdida y forzado desarraigo de su pueblo, potencian en Luis Rius sentimientos de identidad y pertenencia que se constituyen en riqueza cultural y refuerzan su personalidad básica en el exilio.
Del numeroso elenco de poetas taranconenses de la segunda etapa de la generación del 27 (1927-1936), es Luis Rius el más comprometido con la etnografía y antropología cultural. Una de las carpetas que desaparecieron de su archivo personal, en el saqueo de su vivienda en 1936, contenía las anotaciones que tomaba en sus encuentros con las personas mayores que vivían en las mencionadas cuevas, donde encontró un variado conjunto de temas, entre los que se encontraban vocabulario campesino, toponimia rural, apodos, utilizados como identidad social, refranes populares, ritos de paso, vocabulario vulgar de plantas y animales silvestres, el Duque de Riánsares, etcéteraa, que se reflejan abundantes en su Romancero y en los discos del Cancionero.
A finales de la década de los años sesenta, llegaron a Tarancón los primeros ejemplares del Romancero de Fernando Muñoz y la Reina María Cristina [México 1966] de la mano de Manuel Bonilla Baguetto, hijo político del autor, En el año 1973 se editó el disco Cancionero de Tarancón, del que su hijo, el poeta Luis Rius Azcoitia donó un ejemplar al Colegio Público Ruiz Jarabo, que estuvo a disposición de los varios grupos folklóricos locales (El Sotanillo, Péndola y Caño Gordo) deseosos de enriquecer sus repertorios musicales, principalmente El Caño Gordo, con motivo de la edición del disco homenaje al fallecido folklorista Félix Collado, quien puso voz a pastores, aceituneras, segadores, muleros y campesinos que transitan por los versos de Rius.
En la segunda etapa de la generación del 27 (1927-1936), en el que Tarancón gozó de un gran ambiente poético y momento literario, al amparo de la tertulia del Colmado los Claves, en la calle del Grillo, y la edición de varios semanarios, como Lecturas Amenas, Letras de Molde, El Popular, La Verdad, Vértices, etcéera, en cuyas páginas gozaban de buena acogida los jóvenes poetas y prosistas de la antedicha tertulia, entre los que se encontraban, los Rius Zunón, Iniesta Quintero, Rafael Alcázar, Jacinto Cañete, etcétera.
Como miembro de la generación del 27, Luis Rius Zunón representa la renovación, la tradición, la admiración por los clásicos y el neoclasicismo. De la misma manera que sus contertulios, no desdeña la poesía social: [aceitunera mocita/ que mal se portan contigo/ el frio de la mañana,/ la niebla de los olivos/]. Cultivador del neoclasicismo de Moratín, recrea su tarde de toros en Madrid [trombón, platillos y bombo/ se portan como leones/ e incitan al redoblante/ a redoblar sus redobles], con recursos de rima interna, como hiciera San Juan de la Cruz en la estrofa XIV del Cántico Espiritual.
Obras:
- Romancero de Fernando Muñoz y la Reina María Cristina. México, 1966. Segunda edición Editorial El Candil, 2014. Su publicación le fue sugerida por don Ramón Menéndez Pidal.
- Cantares y Poemas, Obra Completa. Edición de Pedro Cerrillo y César Sánchez Ortiz. Editorial Renacimiento. Sevilla, 2018. Colaboran Universidad de Castilla-La Mancha, Patronato Universitario Cardenal Gil de Albornoz y Ayuntamiento de Tarancón. La obra recoge el archivo personal del autor, donado por sus sucesores a la Universidad de Castilla-La Mancha.
- Canciones de cuna y villancicos de la Mancha Alta, Volumen I, 1972. Letra y Música de Luis Rius Zunón.
- Bailes y Canciones de la Mancha Alta. México Editorial El Candil, 1973. Letra y Música de Luis Rius Zunón. Contiene Camperas, romances, seguidillas y jotas.
- Poemas varios se incluyeron en las antologías poéticas: Poetas Taranconeros, edición de la Revista MALENA. Tarancón, 1990. Antología de Poetas Taranconeros. Concejalía de Cultura, Excmo. Ayuntamiento de Tarancón, 1997. 10º Aniversario de la creación de la Bilioteca Municipal “Luis Rius” Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Tarancón. Félix: Dos discos de canciones de Tarancón y la Mancha Alta, Tecnosaga, 1987.
Referencias:
- María Olmedilla Martínez, “Luis Rius Zunón: Literatura infantil y folclore”, en César Sánchez Ortiz y Arantxa Sanz Tejeda (coords.), La voz de la memoria, nuevas aproximaciones al estudio de la literatura popular de tradición infantil. V Jornadas Iberoamericanas de Literatura Popular Infantil. Homenaje a Pedro Cerrillo, Cuenca, 18,19 y 20 de octubre de 2018, Cuenca Universidad de Castilla-La Mancha, 2019, pp. 385-395.
- María Olmedilla Martínez, “Luis Rius Zunón. Un humanista taranconero”, Los Ojos de la Tierra, Invierno de 2022, https://losojos.es/. Consulta 25-2-2025.