Licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad de Valladolid en 1924, después de una atípica trayectoria estudiantil que le llevó por cuatro Facultades de Medicina y una suspensión intermedia de los estudios durante siete años (AGA, expediente personal). Ese período de formación universitaria implicó que prácticamente estudiara en el veinticinco por ciento de las Facultades de Medicina existentes en España en esta época.

Tras finalizar sus estudios de medicina trabajó en la Clínica de cirugía ortopédica y reeducación del Servicio de Sanidad militar, en el hospital de Madrid-Carabanchel, bajo la dirección de Manuel Bastos Ansart (El Sol, 16-5-1924, p. 2 y 12-7-1924, p. 2). Su siguiente destino fue el ejercicio de la medicina general en Priego (Cuenca). En 1928 se trasladó a la localidad de La Nava de Ricomalillo, ubicada dentro de las Antiguas tierras de Talavera, donde permaneció hasta enero de 1933 (El Sol, 16-5-1924, p. 2 y 12-7-1924, p. 2).

En fecha indeterminada realizó una estancia en Suiza para ampliar estudios sobre tuberculosis, según información facilitada por Dolores González Abadía, sin poder precisar la fecha de la estancia. A comienzos de 1933 fue nombrado médico encargado de los servicios de tisiología de la Enfermería y dispensario antituberculoso de Talavera de la Reina (El Castellano, Toledo, 19-1-1933, p. 3), adscrito al Centro Secundario de Higiene Rural (CSHR), que se inauguró el 6 de febrero de 1933, donde desarrolló su actividad profesional hasta el inicio de la Guerra Civil. Estos servicios se configuraron como un dispositivo moderno de lucha contra la tuberculosis que contaban con actividad dispensarial, de hospitalización y de prevención.

A esta actividad se unía el ejercicio libre de la profesión. Consta que en Talavera mantuvo una consulta de medicina general, pulmón y corazón y rayos X, en la que ofrecía tratamiento de la tuberculosis por neumotórax, entre otras técnicas (anuncio en La Calle, 10-9-1934). Ejerció como médico de la Anónima de Accidentes; de la Caja 10  de Previsión y Socorro y de la plaza de toros.

Fue director y fundador de la revista Salux, publicación mensual de la que se editaron 38 números de manera ininterrumpida entre mayo de 1933 y junio de 1936, junto a Francisco Andrés Henche, que sería su redactor jefe. Su publicación finalizó por la obvia razón del inicio de la Guerra Civil.

La revista contó con la colaboración de un número importante de profesionales sanitarios de Talavera de la Reina, así como de Toledo y del ámbito nacional. El autor que aportó un mayor número de trabajos fue precisamente González Cogolludo, quien publicó siete trabajos originales:

• “Infiltraciones pulmonares en niños”.
• “Tratamientos quirúrgicos en tuberculosis pulmonar”.
• “Síndromes de tipo digestivo en procesos pulmonares”.
• “Hiperclorhidrias rebeldes consecutivas a inyecciones endovenosas de alcohol”.
• “Falsas hemoptisis”.
• “Pleuresías purulentas en los niños”.
• “Algunos datos sobre la labor desarrollada en el Dispensario Antituberculoso de Talavera de la Reina”.

Además, la revista contaba con una sección denominada “Fichero radiográfico”, publicada en 34 de sus 38 números, en la que González Cogolludo comentaba una imagen radiológica. De las sesenta reseñas realizadas en la sección “Revista de libros”, 45 fueron realizadas por González Cogolludo, mientras que en la sección “Revista de revistas” el mismo autor realizó el 33,7 por ciento de las 255 reseñas publicadas. Cabe, pues, concluir a este respecto que Cogolludo tuvo un papel de la máxima relevancia en la génesis y mantenimiento de Salux.

De forma paralela al ejercicio profesional, González Cogolludo participó en órganos directivos de diferentes asociaciones, como el Sindicato Médico de Toledo (El Castellano, 7-11-1931, p. 4); estuvo afiliado a la progresista Sociedad Médico Quirúrgica Española, y al menos, vinculado a la Agrupación Profesional de Médicos Liberales, contrapuesta a la conservadora Asociación San Cosme y San Damián, como veremos más adelante. Igualmente, desempeñó el puesto de presidente de la Cruz Roja local (Archivo General Histórico de Defensa, PSU 196). Fue socio de dicha organización desde 1934, como se puede ver en su carné, que nos facilitó Dolores González Abadía. Fue colaborador de la revista Rumbos, en la que publicó un artículo sobre la tuberculosis, de corte humanístico: “El arte y los tuberculosos” (Rumbos, nº 4, 15-8-1935).

La vida política de Manuel González Cogolludo estuvo ligada al movimiento republicano, y concretamente a Acción Republicana. Por ejemplo, asiste a la recepción de Azaña en su visita a Santander, acompañando a elementos directivos de Acción Republicana (El Cantábrico, 30-9-1932, p. 1). Y después a Izquierda Republicana, según información personal de Isabelo Herreros. También consta la existencia de varias visitas de González Cogolludo a Azaña en sus Diarios completos. Como se sabe, ambos partidos fueron impulsados por Manuel Azaña, de quien fue amigo personal.

En julio de 1935 figuraba como presidente de la agrupación municipal de Izquierda Republicana en Talavera de la Reina (Archivo General Militar de Ávila, L. 9, C1, A.35). Como consecuencia de su apoyo a la Revolución de Asturias de 1934 se le incoó un consejo de guerra, según Julio Fernández-Sanguino, por lo que fue cesado como médico encargado de los servicios de tisiología de Talavera de la Reina (Gaceta de Madrid, 5 y 25-3-1935), aunque finalmente sería repuesto en el cargo (La Libertad, 27-4-1935). Fue candidato en las elecciones de 26 de abril de 1936 para compromisarios para la elección de presidente de la República por la circunscripción de Toledo, en las que se le computaron 71.308 sufragios (Archivo General de la Memoria Histórica. Caja Barcelona 300).

Tras el comienzo de la Guerra Civil González Cogolludo ocupó sucesivamente los puestos de director del hospital de sangre (San Prudencio); jefe de los Servicios Sanitarios de Talavera del Tajo, fechas en las que produjo el cambio de denominación de Talavera de la Reina a Talavera del Tajo (Documentación aportada por Dolores González Abadía); médico jefe del Dispensario Antituberculoso de Alicante y director del Sanatorio de Torremanzanas, en la misma provincia (Documentación aportada por Dolores González Abadía); médico del buque-motor “Turia”, en origen un barco frutero que también realizaba transporte de pasajeros de primera clase (Documentación aportada por Dolores González Abadía); y médico oficial adjunto al consulado en Marsella. La Comisión provincial de Incautaciones propuso declarar la responsabilidad civil de González Cogolludo), incluido en un grupo de trece personas por diez millones de pesetas.

A finales de 1938 Manuel González Cogolludo partió con su familia (mujer y cuatro hijos) hacia América del Sur en el buque Campana. Durante un tiempo ejerció como canciller de la Legación española en Asunción. Finalmente, se asentó en Montevideo, donde ejerció como director de un laboratorio de Análisis clínicos, actividad en la que finalizaría su vida profesional, según el Informe del “Estudio de los doctores Raúl E. Baethgen y Blas E. Rossi Masella” (mimeografiado), facilitado por el Dr. Antonio L. Turnes. Montevideo (Uruguay).

En Uruguay desarrolló una interesante actividad docente, como para la formación de enfermeras auxiliares; en la Organización médica de emergencia y participó en la 2ª Convención Médica Nacional, donde presentó una ponencia sobre “Los Colegios Oficiales de Médicos en España” o como instructor de la División Médica de Emergencia de la Defensa Pasiva y en la Campaña prodonación de sangre promovida por la Facultad de Medicina de Montevideo.

González Cogolludo mantuvo también una presencia en medios de comunicación, tanto de carácter divulgativo como científico. A la primera de estas categorías pertenecen sus publicaciones de corte eugenésico, sobre la tuberculosis y los análisis clínicos.

Bibliografía:

• Atenza Fernández, Juan; Benito Díaz Díaz; y Esteban Rodríguez Ocaña, El Centro Secundario de Higiene Rural de Talavera de la Reina. 75 aniversario de una experiencia modernizadora en la Sanidad, Talavera de la Reina (Toledo), Colectivo de Investigación Histórica Arrabal, 2008.ç
• Atenza Fernández, Juan, “Pequeña biografía del Doctor González Cogolludo”, Alcalibe, Talavera de la Reina, nº 19 (2019), pp. 74-85.
• Fernández-Sanguino Fernández, Julio, Un siglo de luces y sombras en la prensa talaverana, 1824-1936, Talavera de la Reina, Ayuntamiento de Talavera de la Reina, 2009.
• González Cogolludo, Manuel, “Los Colegios Oficiales de Médicos en España”, Actas de la II Convención Médica Nacional de Uruguay (1943), pp. 46-54.
• Lorenzo y de Ibarreta, J.; M. González Cogolludo; y J. Gomensoro Senac, (1957). “Eosinophil count: critical analysis of methods”, Archivos de Pediatría de Uruguay, 1957 Aug; 28(8), pp. 553-557.
• Surraco, G.; W. GIGUENS, M. González Cogolludo, J. Lorenzo y de Ibarreta, “30 Cases of hemolytic disease caused by ABO incompatibility”, Archivos de Pediatría de Uruguay, 1959 Jul; 30, 397-413.