Ramón Gonzálvez Ruiz nació en Puebla de Alcocer (Badajoz), localidad que desde el punto de vista eclesiástico pertenece al arzobispado de Toledo, si bien vivió su infancia en la cercana villa de Talarrubias. Criado en un entorno familiar cristiano, desde niño mostró una vocación religiosa y en 1940 se trasladó a Toledo para realizar estudios eclesiásticos en sus Seminarios menor y mayor, tras los cuales, fue ordenado sacerdote por el cardenal Pla y Daniel en 1952.

Su primer destino como cura ecónomo lo llevó a varias pequeñas parroquias de la provincia de Guadalajara (Cañizar, Ciruelas, Torre del Burgo y Heras de Ayuso), entonces pertenecientes a la diócesis de Toledo. Con posterioridad desarrollaría muchas otras tareas pastorales como capellán de las Hermanas Carmelitas de la Caridad de Toledo, capellán de la Residencia Provincial de la Diputación de Toledo (1962-1993) o consiliario diocesano de Apostolado Rural de Acción Católica (1966-1974) y de la Junta Diocesana de Acción Católica (1969-1974).

Entre 1955-1959 cursó las licenciaturas de Historia Eclesiástica y Teología en la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma y un máster en Archivística en la Escuela de Paleografía y Archivística del Archivo Secreto Vaticano. Su formación no quedó ahí pues con posterioridad se licenció en Historia por la Universidad de Oviedo (1974) y, pasados unos años, obtuvo el título de doctor en Geografía e Historia por la Universidad Complutense (1994). Esa importante preparación en el campo de la Historia y la Archivística marcaría para Ramón Gonzálvez una dedicación académica, que se sumaría a la actividad pastoral propia de su condición de eclesiástico.

Varias instituciones toledanas han sido claves en esa trayectoria científica y profesional. En primer lugar, el Archivo y Biblioteca Capitulares, al que estuvo ligado buena parte de su vida: entró como auxiliar en 1959 a las órdenes de Juan Francisco Rivera Recio –que sería su maestro– al que sucedió desde 1976 en el puesto de canónigo-archivero, pasando tras su jubilación en 2003 a la categoría de Archivero-Bibliotecario emérito. En ese desempeño dejó un importante legado en forma de instrumentos de descripción y catálogos sobre diversos fondos manuscritos e impresos. Su amplia labor docente le ligó durante décadas al Seminario Mayor de Toledo, donde comenzó como profesor suplente en 1962 y acabó ocupando la cátedra de Historia de la Iglesia hasta 1998. Al margen del marco eclesiástico, se hizo cargo de la docencia de Historia Medieval en el Colegio Universitario de Toledo (1974-1977). Finalmente, hay que mencionar a la Real Academia de Bellas Artes y Ciencias Históricas de Toledo, en la que ingresó como académico numerario en 1972, ocupando la medalla IX y pronunciando un discurso titulado “La Biblioteca capitular de Toledo en el siglo XIV”. En 2005 fue nombrado su director, cargo que mantuvo hasta 2010. Con posterioridad la Academia le dedicó la publicación, Creer y entender, en la que además de trabajos misceláneos de diversos autores, algunos textos se dedican a glosar su figura.

Con ser todo esto importante, la verdadera dimensión de Ramón Gonzálvez la alcanza su enorme legado como historiador, plasmado en numerosos libros, artículos científicos y conferencias, así como en la organización de diversos congresos y exposiciones. No se puede conocer la historia de la diócesis de Toledo, especialmente en su etapa medieval, sin consultar sus publicaciones, que abarcan un enorme espectro temporal: las primeras datan de los años 70 del siglo XX y la última de 2018. Además, aún queda pendiente de edición por parte de la Biblioteca de Autores Cristianos de su obra póstuma sobre la Historia de la diócesis de Toledo. Edad Antigua y Medieval, en la que trabajó durante veinte años.

Clasificar tan importante producción científica no es fácil, pero sí se pueden establecer algunas líneas temáticas:

1. La Iglesia de Toledo en época visigoda, sus arzobispos y la actividad cultural y eclesiástica que desarrollaron fue objeto preferente de su atención. En ese campo hay que destacar su obra, San Ildefonso y otros obispos de la Iglesia visigótica y mozárabe de Toledo, una recopilación de trece de sus últimos estudios aparecida en 2018.

2. La vida cultural e intelectual de la diócesis, especialmente durante los siglos XII y XIII, es otra de sus grandes líneas de investigación, que ya exploró en su tesis Hombres y libros de Toledo (1086-1300), publicada por la Fundación Ramón Areces en 1997. A ella hay que sumar muchos otros textos sobre la biblioteca capitular, el mecenazgo cultural de los prelados, la Escuela de Traductores, de la que era un gran conocedor, o los primeros pasos de la imprenta toledana. Uno de sus aportes más significados en este plano de la cultura escrita es el dedicado al estudio y edición crítica de la Biblia de San Luis, impresionante joya que guarda la catedral primada, y cuyo facsímil fue publicado en 2003-04.

3. Precisamente la catedral, en distintos momentos de su pasado medieval también ha sido objeto de su interés, destacando aquí la obra colectiva que Gonzálvez coordinó, La Catedral Primada de Toledo. Dieciocho siglos de historia(2010), en la que se incluyeron trabajos de treinta especialistas.

4. Los mozárabes y la pervivencia en Toledo de su liturgia ha sido también protagonista de varios de sus trabajos. 5. Finalmente cabe destacar el grupo de artículos que dedicó a su tierra natal y a estudiar la evolución de los pueblos y tierras de la comarca de la Siberia y los Montes de Extremadura.

A lo largo de su vida recibió diversas distinciones: consejero del Instituto Provincial de Investigaciones y Estudios Toledanos (IPIET) durante sus cincuenta años de existencia (1964-2014); miembro fundador de la Asociación de Archiveros de la Iglesia en España (1971) y vocal de la Junta nacional de dicha asociación (1984); miembro del Centre Européen de Recherches sur les Congregations et Ordres Religieux (ERCOR) de la Universidad de Saint Etienne de Lyon (1985); correspondiente de la Real Academia de la Historia (1988), de la Reial Acadèmia Catalana de Belles Arts de San Jordi (1990); de la Real Academia de Ciencias de México (2007) y de la Real Academia de Ciencias, Bellas Letras y Nobles Artes de Córdoba (2008); Premio a la Investigación de la Real Fundación de Toledo por sus trabajos de investigación y catalogación de los fondos medievales de la Biblioteca de la catedral de Toledo (1996); o Medalla de la Federación Española de Asociaciones de Archiveros, Bibliotecarios, Arqueólogos, Museólogos y Documentalistas (ANABAD) en reconocimiento a su labor como archivero (2016).

Bibliografía

• Arellano García, Mario y Sánchez Sánchez, Juan, “Una vida de plenitud en el gozo de la fe y la razón”, en Talarrubias a D. Ramón Gonzálvez Ruiz, Talarrubias, Excmo. Ayuntamiento, 2019, pp. 13-56.
• Creer y entender. Homenaje a Don Ramon Gonzálvez Ruiz, t.1, Toledo, Real Academia de Bellas Artes y Ciencias Histórica de Toledo, 2014, pp. 15-65.
• Mingo Lorente, Adolfo de, “Fundadores y directores de la Real Academia de Bellas Artes y Ciencias Histórica de Toledo (1918-2016)”, Toletum, 61 (2016), pp. 115-117.